Reseña: Hard West 2, estrategia sobrenatural en su máxima expresión

Es una vida dura la de un vaquero. Es aún más difícil cuando alguien te ha robado el alma, pero tal es la carga que recae sobre Gin Carter y su maldita cuadrilla de marginados sociales en Hard West 2.

Hard West 2 continúa donde empezamos en nuestro avance, cuando Gin y la banda asaltan un tren fantasma en un intento de encontrar un tesoro escondido. Lo que terminan es una maldición infernal y una lucha para salvar sus almas después de enredarse con un mal indescriptible después de que el “tesoro” resulta ser algo de un horror eldritch que roba tu alma en un juego de cartas. Ya sabes, el típico robo que sale mal.

El resultado es una emocionante experiencia táctica que, a pesar de algunas deficiencias en el diseño de los combates y el desarrollo de los personajes, está a la altura de los grandes del género.

El asalto al tren fantasma es un buen punto de partida, pero Hard West 2 no está realmente interesado en el drama del Salvaje Oeste ni en el horror sobrenatural, más allá de utilizarlo como marco, y en su mayor parte, eso está bien. La oportunidad de convertirlo en un juego de tácticas rico en narrativa estaba definitivamente ahí. Aun así, lo que Hard West 2 echa en falta en cuanto a desarrollo narrativo profundo o interesante, lo compensa con el tono y la atmósfera.

Puede que la ambientación sea sólo un escaparate, pero es un escaparate muy eficaz.

El grupo principal de Gin incluye a Flynn, el maestro del sigilo, y a Laughing Deer, que sigue siendo una caricatura de nativo americano que no tenía por qué serlo, aunque gradualmente se reclutan más luchadores a medida que avanza la historia. Se supone que uno de los grandes atractivos de Hard West 2 es equilibrar la lealtad de tu tripulación tomando decisiones duras pero justas en los momentos críticos. Si consigues fidelizar a un miembro, aprenderá nuevas habilidades, pero si te pones en su contra, puede que se vaya.

Es un sistema familiar. Los juegos de estilo táctico, desde Final Fantasy Tactics hasta Surviving the Aftermath, incluyen capas similares de estrategia centradas en el mismo concepto: tomar decisiones difíciles para mantener unida a tu alegre banda de forajidos.

Hard West 2 quiere distinguirse haciendo que estas elecciones se basen más en los personajes, pero éstos no tienen la suficiente profundidad o desarrollo para que funcione. Resulta un poco superficial y parece una oportunidad perdida, aunque está en consonancia con el enfoque general de la trama y el desarrollo de los personajes.

Y eso está bien, en realidad. A no ser que seas Valkyria Chronicles, puedes pasar de largo con personajes poco desarrollados y una trama que es en su mayor parte palabrería. Lo que importa en un juego de tácticas basado en escuadrones es, bueno, la táctica, y Hard West 2 cumple con creces en ese aspecto.

Ya me entusiasmó el enfoque táctico de Hard West 2 durante nuestro avance de Hard West 2 (enlazado en la parte superior del análisis), y a partir de ahí no hace más que mejorar, aunque los fundamentos del combate sigan siendo prácticamente los mismos. Al igual que en otros juegos basados en escuadrones, controlas a un equipo de personajes con habilidades únicas, utilizando la cobertura y avanzando gradualmente para acabar con las fuerzas enemigas. Hard West 2 cuenta con un sistema de rebote que añade una nueva e inteligente dimensión a la planificación de tus movimientos.

¿Es mejor romper la cobertura y utilizar una poderosa habilidad o seguir la ruta segura y hacer rebotar un disparo bien colocado en la pared (no preguntes, simplemente funciona) para acabar con un solo enemigo? Por lo general, esta última opción es la mejor, aunque eso no me ha impedido probar la ruta llamativa de vez en cuando. ¿Qué es la otra vida sin un poco de riesgo?

Los mapas de Hard West 2 son brillantes, en su mayor parte. Aunque la mayoría de ellos no alcanzan las mismas cotas de emoción que el tutorial del tren, la disposición general y lo que exigen compensan con creces el diseño relativamente anodino.

Imagina los mapas de Desperados o Shadow Tactics, pero por turnos. No puedes evitar a los enemigos para siempre, así que los obstáculos y la cobertura son algo más que formas convenientes de evitar ser descubierto. Son verdaderos salvavidas y herramientas vitales para superar cada desafío.

Cada personaje tiene puntos de acción limitados para gastar en movimiento, ataques normales y habilidades. Si no tienes cuidado, es fácil acabar atrapado y abrumado después de tomar unas cuantas decisiones imprudentes. Afortunadamente, a pesar de parecer despiadado, Hard West 2 tiene algunas características que ayudan a mantener el equilibrio. El sistema de bravuconería te permite volver a actuar en determinadas circunstancias una vez que tu medidor de bravuconería llega al máximo y cualquier personaje que muera en la batalla es revivido en el siguiente encuentro.

Los juegos tácticos, obviamente, te obligan a calcular cuidadosamente cada movimiento. Eso es inherente al ADN del género. Pero los sistemas de cobertura y rebote de Hard West 2, las acciones limitadas de los personajes en cada turno, y otras cosas, hacen que cada victoria se sienta realmente ganada.

El único inconveniente es que el diseño se desvía a menudo hacia el territorio de Valkyria Chronicles. Los mapas a menudo parecen hechos a propósito para fomentar una estrategia específica -quizá dos-, más como un rompecabezas que otra cosa. No es algo malo. Descubrir la solución correcta es satisfactorio en la mayoría de los casos, pero con la profundidad del combate y las posibilidades que presenta, habría agradecido un poco más de libertad y espacio para la experimentación. Sigue siendo excelente, pero espero que Hard West 3 vaya a por todas y te permita crear un caos absoluto en el campo de batalla.

2022 se perfila inesperadamente como el año de los juegos de táctica. A pesar de haber disfrutado del avance, no esperaba que Hard West 2 me atrajera tanto como Triangle Strategy o como Tactics Ogre, que a su vez va a ser rehecho a finales de este año. Sin embargo, si eres un fan de la estrategia, merece absolutamente tu atención.